Uno deja para el verano mil cosas que quiere hacer. Es como si el tiempo, al alargar el día, fuera igual de elástico, y los días realmente no sólo tuvieran más luz, sino también más horas. Y uno se engaña, año tras año, con esa ilusión alimentada tal vez por el recuerdo infantil de veranos interminables junto a la piscina, o el río, o la playa, cuando el tiempo parecía durar para siempre, y se convertían en periodos en los que casi todo era posible. Una mínima supervisión de los adultos, tiempo libre, y todas las opciones abiertas, sin nada que perder y todo por explorar.
Y ahora inconscientemente sigo dejando cosas para el verano, como si entonces fuera a tener el tiempo que no tengo el resto del año. Ya estamos en pleno verano, pero la realidad se obstina en enseñarme que no sólo no tengo más tiempo, sino que por una u otra razón, cada vez tengo menos tiempo para todo eso que quiero hacer.
Y aquí es donde aparece otra receta que no es ni una receta. ¿Pero quién se resiste a algo fácil, fresquito, que casi, casi, se prepara solo y que además, como en toda buena cocina, viene de aprovechar restos más que de hacerlo a propósito? Yo desde luego, no me he resistido. Este plato tiene muchas cosas que me gustan además de lo que ya he comentado. Es un postre que no es dulce, por los frutos rojos, es frío pero no está helado, con base de frutas, se puede dejar preparado de antemano (de hecho, mejor dejar enfriar bien varias horas antes de tomar) y se puede servir así, o en cuencos, en copas, como quieras.
Además, sirve para dar salida a las frutas rojas congeladas del año pasado, y hacer sitio en el congelador para las de la nueva temporada.
Sopa fría de frutos rojos y quenelle de mascarpone con menta
Ingredientes (para 2 personas)
200 gramos de frutos rojos (fresas, frambuesas, arándanos rojos, moras, grosellas, etc. frescos o congelados)
3 o 4 cucharadas de azúcar (45 a 60 gramos)
50 gramos de queso mascarpone
Menta fresca y seca
50 gramos de queso mascarpone
Menta fresca y seca
Preparación
Poner los frutos rojos y el azúcar en una cacerola a fuego medio y mantener hasta que se disuelva el azúcar y las frutas estén suaves y translúcidas, removiendo bien.
Batir las frutas hasta conseguir una sopa, colar si se desea para eliminar los restos de las pepitas y dejar enfríar al menos dos horas en el frigorífico. En el momento de servir, acompañar de una o dos quenelles de mascarpone, y espolvorear con menta seca picada el plato. Decorar con hojas de menta.
Otra delicia que preparas. Se ve divina y perfecta para el verano. Me encanta ese color rojizo intenso. Simplemente deliciosa.
ResponderEliminarMaria@ A Platter of Figs
Como estamos cruzadas yo aprovecho y guardo para el verano todas tus recetas, para cuando vengan amigos y quiera estar mas con ellos que en la cocina y para cuando nuestras moras, arandanos y frambuesas nos llenen de frutos.
ResponderEliminarsaludos!
Carola
Qué rica esta sopita, tiene que estar de lujo! Aunque yo creo que la tunearía un poco: la serviría caliente con una buena bola de helado. Ains, qué golosa soy!!!
ResponderEliminarJajaja, va de sopas...ahora entiendo tú comentario, pero si están riquísimas y algo diferente a lo que estamos acostumbrados, me encanta la receta...feliz fin de semana...besitos
ResponderEliminarQué sopa más deliciosa! Guau, el contraste de los frutos rojos con el mascarpone és fantástico. Me encanta :)
ResponderEliminarBesitos!
Para mí es toda una receta de lujo, me ha gustado tanto que me la llevo con tu permiso!!! Esto tiene que estar rico, pero a más no poder!!!!
ResponderEliminarMil besos y feliz fin de semana!
P.D: Yo también me dejo cosas para el verano, esperando quizá que el tiempo sea como cuando era pequeña... interminable!
Así es la cocina en verano, recetas sencillas, con poco tiempo de elaboración (que hace mucho calor) y sobre todo, cuanto más frescas mejor!!!
ResponderEliminarBesitos
Me parece una exquisitez! Y los frutos rojos tienen un rojo intenso, una preciosidad!
ResponderEliminarBesos!
Pues a mi me encanta y es cierto eso que dices que en verano queremos hacer más cosas de las que hacíamos en el mismo tiempo... qué locura!!! nos estresamos solitos!!! ;)
ResponderEliminarQué plato más rico por favor!!
ResponderEliminarHelado + chocolate...mmmm
Estoy contigo...deben ser recuerdos de la infancia, pq aunque a mi me pilla ya muy lejos, sigo pensando q en el verano da tiempo de todo
ResponderEliminarde preparar esta receta, sí q me dará tiempo...seguro
Buenísimo.Es lo que apetece.
ResponderEliminarBesos.
que plato tan veraniego!me parece espectacular, y la mezcla deingredientes es increible!besitos
ResponderEliminarPues la verdad es que no puede ser más sencilla ni más apetitosa...qué rica!
ResponderEliminarUn besico!
El nombre de la receta me ha encantado, suena a restaurante caro y pijo, vamos que para hacer babear a los amigos viene genial.
ResponderEliminarEl aspecto de verdad se ve alucinante.
Un besazo
La receta me parece fantástica y fresquita para estos calores y en cuánto al tiempo, puffff me pasa igual que a ti, todo lo dejo para el verano, pero el tiempo es el mismo, o sea, poco.
ResponderEliminarBesotes
Great summer soup full of flavours and aromas!
ResponderEliminarYo también pensaba que cuando llegase el verano tendría tiempo de todo... y nada más lejos de la realidad! Pero buscar un poquito de tiempo para saborear esta sopita de lujo seguro que lo encuentro! ;)
ResponderEliminarBesos
Sandra
Una sopa de corazón, irresistible con este color¡ Nos pasa a tod@s el día pasa volando y nos faltan horas¡¡ Tu sopa una maravilla, Besoss
ResponderEliminarPues a mi me pasa lo mismo, creo que trabajo mucho más!! Y ya estoy dejando mil cosas para hacer en agosto!! Y esto como bien dices fresquito tiene que entrar de lujo! Apetecen mucho estas cositas ahora!! Besos
ResponderEliminarIdeal para el verano, sencilla y buenísima!!!!
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